El Covid-19 golpeó al mundo hace dos años y desde entonces sus efectos a nivel social, económico, tecnológico, educativo y de salud no paran de sentirse. El Global Risks Report 2022 del Foro Económico Mundial revela grandes retos para los próximos años, sin embargo, más que centrarme en ellos quiero poner la voz sobre las oportunidades que estos suponen para una región como la nuestra.
La necesidad es el mayor incentivo de la innovación y como hemos evidenciado en el mundo entero, la pandemia despertó la posibilidad de acelerar la transformación digital a un nivel que soñábamos tener en las próximas décadas.
El Índice Global de Innovación 2021 de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI) posiciona a Costa Rica en el tercer lugar a nivel latinoamericano, mientras que Panamá se coloca en el puesto número 10, República Dominicana y El Salvador en los puestos 13 y 14, y Guatemala en el 16.
Asimismo, el informe “Datos y hechos sobre la transformación digital 2021”, de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), revela que nuestra región tiene una penetración de usuarios de Internet del 67%, constituyéndose como la cuarta en el mundo después de Norteamérica (88.5%), Europa (82.5%) y la Comunidad de Estados Independientes (CEI, 72.2%).
El avance en esta materia ha sido enorme en las últimas dos décadas. Datos del Banco Mundial revelan que en el 2001 el porcentaje de hogares con acceso a Internet en América Latina y el Caribe era de apenas un 6%, en el 2010 ya había avanzado a un 35% y en el 2019 llegó a 66%.
Impulsar el talento digital
Estos hallazgos muestran un panorama positivo para la región. Como el mismo FEM lo señala en su reporte de riesgos, entender la preparación digital de un país es clave para construir un futuro más inclusivo.
Parte de esta preparación se centra en la calidad del talento que estamos formando para el rubro tecnológico. El reporte del FEM revela que hay una falta de 3 millones de profesionales cibernéticos en el mundo. Considerando la profesionalización de la educación en nuestra región, tenemos la posibilidad de ser un semillero de esos talentos innovadores que se están necesitando.
Conscientes de esta realidad, en Cisco Networking Academy hemos capacitado a más de 97,000 jóvenes en Centroamérica y el Caribe en las áreas de TI más demandadas, como redes, ciberseguridad e IoT, a través de 740 academias activas a lo largo y ancho de la región.
Cerrar la brecha
Asimismo, desde Cisco entendemos que contar con la tecnología y la infraestructura para soportar el entorno digital actual no es suficiente si las personas no pueden acceder a ellas.
La “inequidad digital” es al mismo tiempo un riesgo a corto plazo, como una oportunidad. Como sociedad, debemos trabajar en conjunto para habilitar el acceso a la tecnología y reducir la brecha del 40% de la población mundial que aún no está conectada a Internet, según cifras del FEM.
Por esto Cisco mantiene su compromiso por impulsar sociedades más conectadas e inclusivas, para optimizar los beneficios de la transformación digital tanto a nivel empresarial como en el ámbito educativo.
El futuro digital de los países reposa sobre la posibilidad de formar talento especializado, satisfacer las necesidades humanas básicas, crear un entorno empresarial favorable e invertir (tanto a nivel público como privado) en innovación y tecnología.
A medida que la innovación y la tecnología continúan avanzando, existe una necesidad continua de desarrollar talento que tenga las habilidades duras y blandas que el mercado digital está requiriendo para suplir los puestos digitales.
Fuente: Cisco